Si vives en Madrid, o si solo has hecho una visita fugaz, tarde o temprano te habrás encontrado con esta famosa plaza. En el cruce de la Calle de Alcalá (entre la Puerta y Gran Vía) con el Paseo del Prado, majestuosa, y siempre rodeada de tráfico, se encuentra esta mítica fuente que ya lleva en pie casi 230 años.
La Diosa Cibeles
¿Quién es Cibeles? o más bien, ¿quien fue? Considerada desde tiempos inmemorables como la diosa de la Madre Tierra (por los Griegos, pero también con anterioridad por los Frigios) y madre de Zeus. Es la personificicación de la fuerza de la naturaleza, de la tierra fértil, de las cavernas y las montañas…
Se la suele representar con una corona en forma de muralla (señalando la fortaleza de su carácter) y montada encima de un carro (que simboliza la superioridad de la naturaleza). Los leones que tiran de dicho carro forman parte de la mitología griega. Atalanta, que de niña fue abandonada y criada por las bestias, es reunida ya madura con su padre. Este le obliga a casarse, pero la joven no desea tal cosa. Frente a la insistencia de su progenitor, llegan a un acuerdo: solo en el caso de que el pretendiente le pueda ganar en una carrera, aceptará contraer matrimonio.
Muchos pretendientes fracasan en el intento, pero Hipómenes, desesperadamente enamorada de ella, recurre a Afrodita (diosa del amor) para que le ayude a conquistarla. Esta, le entrega tres manzanas de oro, con las que consigue distraer a Atalanta durante la carrera y finalmente vencerla.
Hipómenes y Atalanta contraen matrimonio, y en un estallido de pasión, acaban fornicando en un recinto sagrado de Zeus, que como castigo por semejante sacrilegio los transforma en leones. Cibeles, enternecida por la situación, decide atar ambos leones a su carro para que pudiesen tirar juntos de ella durante el resto de la eternidad.
Plaza de la Cibeles
El monumento dedicado a Cibeles fue proyectado entre 1777 y y 1782 por Ventura Rodríguez. Destinado para «La Granja de San Ildefonso» (Segovia), con la remodelación del Paseo del Prado se acabó colocando frente al Palacio Buenavista con orientación hacia la Fuente de Neptuno.
Hasta 1862, la fuente cumplía el propósito de surtir de agua a los ciudadanos. Se decía que el agua tenía propiedades curativas, pero era de tan difícil acceso, que en este año se le añadieron dos surtidores: una con forma de Oso y otro con forma de Grifo (en aquella época, los dos símbolos que aparecían en el «Escudo de Armas» de Madrid).
En 1895, una nueva obra en el Paseo del Prado hizo que la Fuente de Cibeles se trasladara al centro de la Plaza (cambiando además su orientación, que coincide con la actual, mirando hacia Sol). En esta época ya era habitual que las casas tuvieran agua corriente, por lo que se suprimieron los dos surtidores añadidos apenas 30 años antes (actualmente las puedes encontrar en el «Museo de los Origenes«) y se añadieron dos amorcillos en la parte de atrás del carro (recuperando un poco más la idea original de Ventura Rodríguez).
Cibeles y el Fútbol
La relación que tiene la Fuente de la Cibeles con el fútbol no es algo totalmente fuera de lo normal. Hasta en los pueblos más perdidos de la península, se celebran las grandes victorias con un buen chapuzón. Pero en el caso de la Cibeles, se ha convertido en más que una tradición. Desde los ’80 se han celebrado las victorias del Real Madrid en esta fuente, y no siempre ha salido victoriosa la Diosa de la naturaleza.
En el año ’94, tras una victoria de España en la Copa del Mundo, las celebraciones de los hinchas causaron un revuelo al acabar la Diosa mutilada de una mano. En el 2002, de nuevo volvio a ser mutilada la estatua tras una fiesta de despedida de solteros (en este caso, si apareció la mano, en el servicio de un bar). Pero tras estos incidentes (y otros muchos más, aunque de consecuencias menores), se decidió prohibir que los hinchas y los jugadores se subiesen a la estatua para celebrar sus victorias.
Cuando el Real Madrid ganó la liga en el 2003, al ver que no se les permitía el acceso a la Fuente, el entonces capitán Raul dijo: «Bien, diganle al Alcalde que venga. ¡Quiero hablar con él en persona!». Ese año no pudieron colocarle la bufanda a la Diosa Cibeles, pero en el 2007 el Ayuntamiento facilitó una grua para que el capitán llevase a cabo dicha ceremonia.
Otras Cibeles
Nuestra Fuente de Cibeles es uno de los símbolos más reconocidos por los turistas que deciden visitar la ciudad, pero no es la única versión que existe de dicha fuente. En la ciudad de México, se inauguró en 1980 una réplica exacta de la fuente que fue donada por la comunidad de residentes españoles que viven allí, y que se alza como símbolo de hermandad entre las dos ciudades.
En el 2007, en un lugar no muy lejos de aquí, se re-inauguró la Fuente de la Cibelina (en la Calle Madrid, Getafe). Una versión moderna (además de controvertida) y más pequeña de la Fuente de la Cibeles, cuyo fin principal es celebrar todos los logros deportivos del Getafe Club de Fútbol. Si no has tenido la oportunidad de verla, en Flickr tienes esta foto.
Más que una fuente
Parece más que evidente que la Cibeles no es solo una Fuente. Es una parte viviente de la historia de nuestra ciudad. Desde su concepción a finales del siglo XVIII, basada en la mitología de la Grecia Clásica, a los cambios realizados a finales del XIX por comodidad, y terminando con la cultura popular deportiva. Es un emblema de la ciudad, y un símbolo del paso de la humanidad. Esperemos que así sea otros 230 años más…
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30/10/2012
omaresta pagina es muy util aunque de veria de ser de toda españa y no solo de madrid